miércoles, 16 de mayo de 2007

APARENTAR SER QUIEN NO ES

La guerra civil afgana sembró en pánico en muchas familias, pero gracias al testimonio de Nadia podremos entender mejor y solidarizarnos con es gente que lo pierde todo tan injustamente.

Nadia sólo tenía ocho años cuando tuvo que vivir en primera persona los horrores de una guerra. Su hermano fue asesinado en plena calle, lo que provocó serios trastornos psicológicos a su padre. Seis meses después, aunque Nadia no perdió la vida, también se la trastocaron, ya que una bomba explotó en su casa causándole graves quemaduras en todo el cuerpo.

Dos años en un hospital sometida a múltiples y dolorosas operaciones la hizo recuperar una vida normal. Tuvo que reanudar su vida con el rostro parcialmente desfigurado y en un país que había cambiado totalmente tras la subida al poder de los talibanes. Este nuevo régimen prohibía a las mujeres estudiar y trabajar, obligándolas, además, a cubrirse con el burka siempre que salieran a la calle.

Ante esta situación, el único hombre que podría sacar adelante a la familia era su padre. Sin embargo, la muerte de su hijo le generó graves trastornos psicológicos que le impedían trabajar. Entonces Nadia, con tan sólo diez años y sabiendo que la habían regalado una vida por delante, tomó la decisión de hacerse pasar por su hermano muerto y poder así buscar trabajo.

Consiguió un trabajo en una granja y después como albañil, pero siempre llevó una vida regida por el temor a ser descubierta. Sabía de las duras represalias que le podría comportar adoptar una identidad falsa, pero siguió ocultando su condición femenina durante once años para poder dar una vida mejor a su familia.

Ahora Nadia desea recuperar su identidad femenina, dejar de aparentar ser quien no es y presentarse ante el mundo siendo quien es en realidad. Una chica con una fuerza, un valor y un corazón enormes que la llevaron a arriesgar durante tantos años su propia vida por salvar la de los demás.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El mundo islamita es muy retrógrado. Siguen estancados en la Edad Media.
¿Para qué está la ONU? Debieran tomar medidas en contra de estos fanatismos