martes, 8 de mayo de 2007

CON LOS OJOS A LA MISMA ALTURA

Aunque pensemos que los deportistas viven todo el día pegados a un balón, sabemos que podrían vivir sin él. Pero este no es el caso de Qian Hongyan. Para esta niña china de once años un balón de baloncesto era su medio de vida. Todo comenzó en el año 2000 cuando Qian sufrió un grave accidente de tráfico que le sesgó las piernas a la altura del tronco. Qian sólo tenía cinco años cuando esta tragedia sucedió, pero la ha condenado a una inmovilidad de por vida.


Para algunas familias la solución inmediata hubiese sido poner unas prótesis a la niña, pero hay gente que no se lo puede permitir. Los padres de Qian eran tan pobres que no podían comprar una prótesis para que su hija volviera a caminar. Muchas veces lo más importante es tener una buena mente que encuentre buenas soluciones. Y no hace falta ser un Einstein para lograrlo, cualquier invento, aunque parezca absurdo, puede ser efectivo. Este es el caso de la familia Hongyan. Después de meses pensando cómo ayudar a la niña, su padre ideó un sistema casero que permitiera a la pequeña recuperar parte de su autonomía perdida. Le colocó bajo el tronco una pelota de baloncesto a medio inflar, gracias a la cual podía mantener el equilibrio, y le dio dos cepillos de lavar la ropa que simulaban ser unas muletas. En los cinco años que estuvo sin piernas, Qian usó seis balones que le permitieron desplazarse de casa a la escuela sin la ayuda de nadie.


Pronto la historia de esta niña china recorrió el país, logrando así que en un hospital al sur de Pekín, el China Rehabilitation Centre, le regalaran sus primeras piernas artificiales. Gracias a sus nuevas piernas, algo tan simple como que los ojos de sus compañeros volvieran a estar a la misma altura que los suyos, cambió su vida.



Ahora, Qian estrena sus segundas piernas metálicas y ya no sólo mira cara a cara, sino que sonríe de frente.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola. De verdad que esta historia y otras de las que hablas son difíciles de creer y parecen irreales, así que me parece muy acertado el nombre de tu blog

Laura dijo...

Y luego soy yo la gore, vaya fotos maja

Anónimo dijo...

Hola.Esta es la historia que mas me a gustado, pero todas me llaman la antencion.Bueno espero que pongas mas pronto.